El viernes 13 de abril llegó a mi correo electrónico un mensaje cuyo asunto decía: VOTO RAZONADO. Contenía un archivo adjunto en el que un profesor universitario presentaba las razones por las cuales él votará por Andrés Manuel López Obrador. Lo presento enseguida:
VOTO
RAZONADO.
Soy profesor universitario. Tengo casi 60 años,
con más de 35 años en la docencia. Jamás he estado afiliado a ningún partido
político.
Desde que era un niño he escuchado, sobre todo
a la clase política de este país, que México es un país en vías de desarrollo,
con gran potencial y gran cantidad de recursos naturales y humanos. Sin
embargo, hoy día, somos un país con más de la mitad de su población sumida en
la pobreza.
He visto y experimentado el actuar de 10
presidentes de la república: las dos últimas administraciones panistas, más
ocho priistas. Ninguna de ellas ha sido capaz siquiera de cimentar unas bases
sólidas para el crecimiento y desarrollo que impulse a México hacia esa anhelada
meta.
En cambio, si he sido testigo de pésimas administraciones
(federales y estatales), de políticos corruptos
y sin escrúpulos, de guerras sucias, de campañas negras, alto
índice de desempleo, violaciones a los derechos humanos, feminicidios,
empobrecimiento de las clases medias, inflación galopante, inseguridad, desigualdad social, aumentos
constantes en la canasta básica, así como en energía eléctrica, gas y gasolina,
masacres y asesinatos que quedan impunes, acuerdos y componendas entre PRI y
PAN para conservar al país en el status
quo en que lo han mantenido por décadas y preservar sus propias canonjías
de clase privilegiada.
Durante ese período, he visto países que se
levantan vigorosamente aún después de ser desbastados por las pasadas guerras
mundiales: Alemania, Japón, Francia, Rusia. Los países emergentes asíaticos que
han resurgido en las últimas décadas para tener un crecimiento impresionante.
Aun países latinoamericanos como Chile y Brasil ya nos han superado en materia
de desarrollo y crecimiento.
Si, México como país es mejor que antes, pero
no gracias a nuestros gobernantes, sino a pesar de ellos. Porque han existido a
lo largo de su historia hombres, mujeres y organizaciones ,políticas o no, que han sabido levantar su voz y movilizar a
sectores de la población para conquistar muchos de los derechos y beneficios
con los que ahora contamos y frenar las ansias de poder económico y político de
esa clase privilegiada y de los grupos que representan.
La política es una actividad noble, de bien
común, pero muchos políticos la han desvirtuado. Dicen representar al pueblo.
Eso ya no se lo cree nadie que tenga dos o más dedos de frente. Han demostrado
a lo largo de sus actuaciones, que están para servirse ellos mismos y a quienes
realmente representan.
Por eso y otras razones he decidido apoyar la
candidatura a la presidencia de la república de Andrés Manuel López Obrador. Un político con virtudes y defectos, como
cualquier ser humano, pero nadie puede refutarle su honestidad y su
perseverancia por hacer de México un país más equitativo. Un político que dará
la lucha por librar a México de su verdadero mal: la corrupción. Un hombre
convencido que la educación es la verdadera vía para mejorar las condiciones
sociales de un pueblo “educado” a través del duopolio televisivo Televisa y TV
Azteca. Un hombre que pretende limitar
los insultantes sueldos que reciben los funcionarios de un país pobre,
así como acabar con muchos vicios
administrativos.
En estas
elecciones mi voto será para López Obrador, porque ha demostrado ser el único
con un verdadero proyecto de nación diferente. Los demás candidatos representan
lo que ya hemos vivido en los últimos 82años.
Estoy consciente de lo que veremos y
escucharemos en todos los medios de comunicación, tratando de infundir de nuevo
temor en la población como ocurrió hace 6 años:
-
Un
apoyo desmedido para los dos candidatos de PRI y PAN que representan el
conservar las cosas como están. Porque así conviene a muchos políticos y grupos
enquistados en el poder por décadas.
-
Un
ataque generalizado de dichos medios hacia el candidato que representa el
verdadero cambio: dirán que es mesiánico, intolerante, peligro para la nación,
enemigo de los empresarios, émulo de Hugo Chávez, que va acabar con la nación,
y otras absurdas linduras.
-
Encuestas
manipuladas para direccionar la intención del voto de quienes aún no se deciden
por uno de los candidatos.
-
Y
quien sabe cuántas cosas más se les ocurran para aprovecharse de la ignorancia
política de la gente y de sus apremiantes necesidades.
No pretendo crear conciencia en nadie, cada quien es
responsable de la propia. Tal vez jamás en mi vida vea el ascenso al poder de
un verdadero político, pero quedará en mi conciencia el haber hecho esta
pequeña aportación en esa dirección.
Un abrazo.
Jaime Flores H.